Encontrándose en los Altos de Jalisco, ALPARI tiene unas instalaciones magníficamente bien construidas, constituyendo su principal problema la poca capacidad utilizada de las mismas.

La empresa contrató a ZIMMA para llevar a cabo una valuación independiente, que permitiera decidir a los accionistas la conveniencia de vender o continuar operando el negocio, habiéndose decidido por esta última ruta.