Banca Quadrum fue una de las pocas instituciones financieras que no solicitó el apoyo del gobierno federal, a raíz de la crisis de 1994, sin embargo, esto implicó eventualmente, el que el capital del banco se viera severamente menguado, habiendo sido requerida por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores su re-estructura.

Banca Quadrum contrató los servicios de ZIMMA para llevar a cabo la venta del banco a un grupo que, por sus características y capacidades, tuviera la capacidad de apoyar financieramente a esta institución, cosa que así se hizo.

Por así convenir a lo intereses de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y por considerar que era mas viable la liquidación de la institución que la venta de la misma, se procedió por esta vía.